Televisa podría ser sancionada por capítulo de la Rosa de Guadalupe

Rosa de Guadalupe

Entre las televisoras, sistemas de canales restringidos y plataformas de videos on demand, la competencia para ganar relevancia entre las audiencias está en la generación de contenido. Ahora no basta con contar las mismas historias con diferentes formatos o apostar por incluir los mejores efectos para conquistar al público; las personas esperan recibir contenidos que sean empáticos con su realidad. No obstante, llevar esta premisa al extremo parece que ha metido en un nuevo problema a Televisa por un capítulo de su popular programa La Rosa de Guadalupe.

Durante la transmisión de ayer, dicha producción emitió un capítulo titulado “Calcetitas rojas” mismo que narró la historia de una joven que encuentra el cadáver de una niña con signos de violencia.

Calcetas rojas

La trama hace referencia al reciente caso de Lupita, una menor de edad cuyo cuerpo fue encontrado en el bordo de Xociaca y de la cual poca información se tenía, por lo que durante gran parte de la investigación de su muerte fuer reconocida por los medios y autoridades como “Calcetitas rojas”.
Horas antes de la emisión de dicho capítulo, desde su cuenta oficial en Facebook, la producir compartido un avance de la trama mediante la publicación de un video que los usuarios no dudaron en criticar al considerar que dicho programa “lucra con el dolor”, “reducir un caso de violencia” y “tan doloroso”.

Ante la indignación que provocó el tema, la activista contra feminicidios identificada como Frida Guerrera realizó una petición en Change.org para que Televisa sea sancionada por “lucrar” con una tragedia.
La petición se acompaña de un escrito en el que la activista afirma que “nos pareció preocupante que ‘Calcetitas Rojas’, se manejará en ese espacio, el cual se caracteriza por ‘presentar’ problemas cotidianos, envueltos en un halo de falta de seriedad, donde se tocan con poca ética la problemática de violencia que vive nuestra sociedad. En temas como desaparición, trata de personas, feminicidios”.

De igual manera, afirmó que el programa raya en la parodia en “donde su caso puede interpretarse por quienes ven este tipo de programación como algo ‘irreal’ o que no fue verídico. O con morbo”