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Luna azul para renovar energías

temazcal luna

A lo largo de los años hemos presenciado impresionantes y variados fenómenos naturales que, al no suceder a diario, deseas que se congele el tiempo para poder apreciarlos por mucho más tiempo, como el que recientemente pasó, en la madrugada del domingo 22 de agosto: el famoso fenómeno astronómico llamado “luna azul”.
De acuerdo con el canal informativo CNN, el primer registro de una luna azul fue en 1528 y recibe este nombre al ser la cuarta luna llena del verano. Usualmente se tienen tres de éstas por cada estación del año.
Es conocido que nuestros antepasados aprovechaban estos fenómenos para crear rituales y dedicarlos a sus dioses, pero en la actualidad es poco común que se sigan practicando dichos rituales y uno de ellos son los temazcales.
La cultura maya y los nahuas utilizaban el temazcal y honraban a Meztli (luna) cuando pasaba este fenómeno, las cuatro puertas se dedicaban a esta deidad y mientras éstas pasaban, cantaban bellos rezos para así conectar con la luz de la luna y las energías de los participantes. El temazcal y Meztli combinados hacen que las energías delos hermanos temazcaleros se compartan y recarguen buenas vibras.
He sido participante de esta familia temazcalera la mayor parte de mi vida, lo que me ha permitido vivir distintas experiencias totalmente diferentes en cada temazcal al que he asistido, puesto que cada chamán o chamana (personas encargadas de llevar este ritual) imprimen su esencia en esta ceremonia dedicada a los guardianes de los cuatro rumbos.
Tanto a mí, como a mis hermanos, nos ayuda mucho en la vida diaria al sentir que sanamos tanto física, como espiritualmente evocando los elementos vitales que son agua, fuego, tierra y aire, lo que representa una especie de medicina para el cuerpo y el alma, además de que el ambiente en el lugar contribuye a sentirnos como una familia en la que no se juzga a nadie bajo ninguna circunstancia, al contrario, somos libres de expresar lo que sentimos y lo mejor es cuando nos unimos y empatizamos con quienes están ahí por un propósito específico como pedir por la salud de alguien, vivir el duelo de una persona, dejar miedos e incluso morir para salir renovados y ser mejores cada día.
Ojalá que la luz de Meztli siga iluminando y acompañando a todo aquel que necesite de ella y que la práctica de estas ceremonias ancestrales en los temazcales siga trascendiendo pues es una experiencia que al menos debemos vivir una vez en la vida, ya sea por placer o al menos para no quedar con duda.