Adicción Comunicación

Aunque nuestro cuerpo no este cansado y vemos bostezar a una persona, automáticamente nosotros lo hacemos. Pero, ¿Cuál es la razón de que suceda esto? 

Una investigación de la Universidad de Nottingham. menciona que al contagio del bostezo involuntario se origina en la corteza motora primaria del cerebro, la cual es responsable de la ejecución del movimiento a través de los impulsos neuronales. Los resultados arrojan luz sobre la base neural de este ecofenómeno y esto es lo que genera que repitamos automáticamente las palabras o acciones.
También ser propenso al contagio del bostezo depende de la excitabilidad cortical y la fisiológica del córtex motor primario de cada persona, es por eso que la necesidad de bostezar cambia en cada uno de nosotros, es decir, nuestra capacidad para resistirnos al contagio es limitada e incluso el intento de reprimirlo aumenta la necesidad de bostezar. Por mucho que lo intentemos, nuestra predisposición al bostezo no va a cambiar.