Este 3 de diciembre, el mundo del cine se puso de luto ante la triste noticia del fallecimiento de la actriz y vedette cubana Gina Romand, quien es recordada por ser una de las figuras más reconocidas en las películas de acción y aventura durante la Época de Oro del cine mexicano en las décadas de 1960 y 1970.
Gabriel Valera, hijo de la actriz, dio a conocer que la diva del Cine de Oro mexicano falleció a los 84 años de edad a causa de complicaciones de una neumonía que padecía, enfermedad por la que se encontraba hospitalizada, ya que el pasado 26 de noviembre, él mismo había informado que su madre se debatía entre la vida y la muerte y agradeció sus oraciones y buenos deseos hacia la actriz.
Según la información compartida a través de las redes sociales del hijo de Gina Romand, al ser internada, fue ingresada a terapia intensiva y luego mostró mejoría, por lo que fue llevada a terapia intermedia. Sin embargo, al parecer, su condición agravó y terminó por perder la vida.

A través de una conmovedora publicación en su Twitter, acompañada de una fotografía de la actriz, con todo el dolor de su corazón, Gabriel se despidió de su mamá, quien asegura que ya descansa en paz al lado de su papá. Además, agradeció por todo el apoyo y los mensajes de condolencias que ha recibido en estos momentos tan duros.
Era una mujer muy fuerte, que siempre me enseñó la disciplina, que siempre me enseñó a levantarme cuando me caí en la vida, siempre me enseñó a salir adelante y espero poder lograrlo ahorita. Mi madre y yo teníamos una comunicación muy especial, muy diferente, muy nuestra y pues ahora me siento como muy desorientado, como muerto yo también.

– Gabriel Valera

Con lágrimas en sus ojos, Gabriel dijo que siempre mantuvo una muy buena y cercana relación con su madre. Además, compartió las últimas palabras que su madre le dijo antes de morir: “Me dijo que me amaba mucho y que me fuera de gira con mi papito querido y que ganara mucho dinero para que la llevara a París”.
Familiares y amigos dieron el último adiós a la vedette en una funeraria al sur de la ciudad de México, donde su hijo aseguró que los restos de su madre serán cremados y sus cenizas reposarán en la cripta familiar. Devastado y bastante afectado por el deceso de su madre, Gabriel agradeció a los presentes y a todas las personas del medio que lo han llamado y le han enviado mensajes.