Quiero un amor loco, un amor que me desarme, que me haga sentir cada parte de mi cuerpo deslumbrante al momento en que su mirada me observe. 

Quiero un amor imposible pero alcanzable al mismo tiempo, un amor que me saque sonrisas porque puede pero más que nada porque le gusta. 

Quiero un amor de cuentos porque me juran que no existen y yo quiero demostrarles que si existen y que son como el mío.

Quiero un amor luchón, un amor que no sea fácil, que me saque lágrimas de lo intenso que es, un amor que me haga sentir hasta el enojo. 

Quiero un amor ilógico, un amor que pueda explicarse con palabras, un amor que se vea, que exprese, que inspire, que este. 

Quiero un amor moderno pero con un toque de antigüedad, ese toque que nos permita luchar en la adversidad pero dar la  libertad necesaria.

Quiero un amor en equipo, un amor de dos, en donde nadie da más, sino que dan lo mismo, igualitario, hermoso, difícil, difícil... difícil. 

Quiero un amor seguro pero que me haga cuestionar sobre mí mismo, sobre mi camino, a dónde voy y si en verdad me gusta lo que soy. 

Quiero un amor que me haga la vida jugosa, divertida, escéptica, picosa, aventurera, misteriosa, distinta, inexplicablemente sorprenderte a su lado. 

Quiero un amor que me arranque risas pero también gestos de desagrado, de duda, de intriga. Quiero de esos amores que al recostarte en cama por las noches te haga sentir pleno a pesar de todo. 

Quiero saber lo que es amar sin barreras, con locura, con pasión; quiero que cada célula en mi cuerpo se electrifique con una caricia, quiero un amor loco, loco, loco. 

Quiero ser todos los apodos, quiero ser todas las experiencias, quiero ser todos los suspiros, quiero ser todas las lágrimas, quiero SER a su lado.