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Esperanza

Vida

Ir caminando por la calle sin rumbo alguno puede ser una de las cosas más delicioso que exista, el viento pegar contra mi cara, la música que inunda mi cuerpo gracias a los audífonos... mi parte favorita puede ser observar a la gente de mi al rededor ¿Qué historias pueden tener? Los gestos de las personas te pueden decir mucho de las personas. Están aquellos que tienen el ceño fruncido, el enojo los rodea, tal vez una pelea con su jefe, su pareja, con sus padres o lo acaban de despedir pero entonces tenemos ese ceño triste con el cual mi mente puede jugar más, tal vez un rompimiento, una muerte, una persona en el hospital o simple y sencillamente un mal día, entonces podemos ver el ceño de tranquilidad que puede implicar un vida perfecta o todo lo contrario una persona que sabe manejar lo que pasa continuando sin dejarse caer. 

Sea cual sea la situación de las personas me es imposible pensar como nuestro al rededor no importa, el problema que yo tengo en este momento es más grande que el del otro sin importar de que se trate, si yo estoy mal es lo importante no me puedo detener unos segundos y mirar al de lado dándome cuenta que no soy a única que la está pasando mal pero lo más importante que mi problema no es más difícil que el del otro por ninguna circunstancia, que la vida decidió darle a cada quien el problema que puede resistir pero eso no nos da derecho de creer que somos más fuertes que otros.

¿Qué problemas existen en el mundo? Millones, podemos tomarnos un tiempo e ir a un hospital mirando como hay familias llenas de esperanza viendo como alguno de su ser querido está luchando por seguir con ellos o incluso podemos ver a la familia dando el ultimo adiós a aquella persona que ya cumplió su misión en la vida. Tenemos a las personas que están luchando en contra de una adicción, aquellos que perdieron la esperanza y ya no le ven más sentido a nada, aquellos que se sienten solos, aquellos que están perdidos, hay tantos problemas en esta vida pero lo único que podemos esperar es que eventualmente todo va a estar bien, que a su manera todo tiene un final y que el camino correcto no es sinónimo de un camino sin dolor. 

Vamos a aprender a bailar bajo la lluvia, vamos aprender a vivir.